Aún recuerdo la última vez que te ví.
Yo estaba por el jardín y tu estabas en el garaje cuando yo iba a subir por las escaleras y me acordé en que días antes estabas con la tensión alta y un poco resfriado y pensé en decirte "¡Ey tío!" y tú me dijiste "¿Que pasa amigo?" y yo te respondí pues "Ahí estamos", tu rostro era el mismo de siempre con esa sonrisa siempre presente y con ganas de ayudar a los demás por mucho que maldecieras a todos los santos habidos y por haber.
Después de verte mi cabeza no pensó ni un instante en ti, una de las cosas por las que me siento muy enfurecido conmigo mismo, porque no me paré ni un solo momento en ver si tenía que ayudarte en algo y ni siquiera te pregunté si estabas mejor.
Unas navidades trágicas y horribles pasaron rápido sin que tú estuvieras con nosotros y un día 27 de enero nos dejaste.
Dejaste a una mujer que te ama y a unos hijos que te aprecian y te apreciarán siempre.
Dejaste a todo una familia y amigos que por muchos roces que existieran te tenían con gran consideración y amistad.
Un día frío de enero escuche como mi madre llamaba a mi padre para decirle que nos había dejado y entonces decidí quedarme en la cama toda la mañana porque no lo asumía y no lo entendía. No entendía como una gran persona nos podía haber dejado.
Abrí la ventana de mi habitación y ví a mi abuela y en ese preciso instante un mundo entero se me vino encima. Después hablé con mi `yaya´ y me lo dijo de una manera un tanto dulce e infantil. Bajé las escaleras y ví tu coche, ese coche que te habías comprado hace poco y que tanta ilusión te había hecho. El día fue el peor en mucho tiempo pero no tanto como el que se avecinaba.
Era 28 de febrero y ese día fué el día de tu funeral porque por desgracia todos tenemos uno y no sabemos cual es. Sin lugar a dudas ese ha sido el peor día de mi vida aunque sé que los habrá aún más horribles.
Abracé a mi prima con toda la fuerza que podía imaginar, una fuerza aterradora y que nunca antes había sentido. Después llegó el turno de mi tía, mi tía favorita, y un halo de tristeza y desesperación inudó todo mi ser. Finalmente mi primo me miró y como se suele decir una imagen vale más que mil palabras.
Desde el tanatorio recorrimos la carretera hasta el cementerio, un camino amargo y de gran desconsuelo.
Mi prima me miró y en sus ojos estaban todos y cada uno de los recuerdos que había compartido con su padre. Esos ojos se metieron en mis entrañas y sé que jamás voy a olvidar esa mirada, esos ojos.
Una enfermedad, cáncer, se había llevado por delante cientos de ilusiones y sueños y sumido en el más absoluto pesar a toda una familia.
Malditos cigarrillos, maldito veneno.
Sé que tu alma nos recordará eternamente igual que nuestra alma jamás te olvidará.
En el recuerdo a tu sonrisa, y a tu persona, y a tu alma, y a tu ser, y a todo tu corazón.
Siempre con nosotros y contigo.
Y escribo esto mientras unas lágrimas caen por mi cara y un lloriqueo intermitente parece terminar.
miércoles, 27 de febrero de 2013
martes, 26 de febrero de 2013
En el limbo.
Me sumergeré de nuevo en la realidad y soñaré con tu nombre. Después caminaré hasta el limbo y allí esperaré a que se haga de noche.
Por la noche recordaré esos instantes en los que tus suspiros entraban por mi espalda y hacían viajes por mundos nunca vistos. Mundos inexplorados. Porque cada centímetro que me separa de ti es un mundo nuevo por descubrir.
Cuando despierte y el amanecer llene el lugar de luz me inventaré historias que guardar para el día en que si estés.
Más tarde mientras aquí el tiempo comience a caer con esos silencios del alma en tu cabeza un ejercito de espectros te inudarán de mi.
Cuando el último rayo de luz me diga adiós, la luna te guiará hasta donde yo estoy. Y vendrás conmigo porque el opuesto de los dos somos tú y yo en la soledad.
Gritarás nuestros nombres al vacío y ya no podrás ahogarte en el silencio más amargo.
Y cuando la oscuridad se vuelva profunda la presencia de roces invisibles bombeardeará nuestros sentidos.
Al día siguiente despertaremos y la tierra nos tragará por no haber dicho todo aquello que no quisimos decir.
Por la noche recordaré esos instantes en los que tus suspiros entraban por mi espalda y hacían viajes por mundos nunca vistos. Mundos inexplorados. Porque cada centímetro que me separa de ti es un mundo nuevo por descubrir.
Cuando despierte y el amanecer llene el lugar de luz me inventaré historias que guardar para el día en que si estés.
Más tarde mientras aquí el tiempo comience a caer con esos silencios del alma en tu cabeza un ejercito de espectros te inudarán de mi.
Cuando el último rayo de luz me diga adiós, la luna te guiará hasta donde yo estoy. Y vendrás conmigo porque el opuesto de los dos somos tú y yo en la soledad.
Gritarás nuestros nombres al vacío y ya no podrás ahogarte en el silencio más amargo.
Y cuando la oscuridad se vuelva profunda la presencia de roces invisibles bombeardeará nuestros sentidos.
Al día siguiente despertaremos y la tierra nos tragará por no haber dicho todo aquello que no quisimos decir.
lunes, 25 de febrero de 2013
La cita con cianuro. Declaración de amor.
La cita célebre de esta semana trata de amor y dice así:
"La mayor declaración de amor es la que no se hace; el hombre que siente mucho habla poco."
Platón.
Algunos pensarán que no decir lo que sientes es un acto de cobardía otros pensarán que eso significa que se trata de una persona tímida y después habrán personas que pensarán que por no mostrar sus sentimientos públicamente realmente no quieren a esas personas.
¿Una persona es cobarde si no dice sus sentimientos a la persona de sus sueños? Yo personalmente creo que no, ya que casi siempre eso va unido a personas tímidas o a las que les cuesta expresar sus sentimientos y por lo tanto catalogar a esas personas como cobardes seria a mi parecer algo erróneo.
¿Y es que acaso por no mostrar en público signos de afecto amamos menos a esa persona? A mi esta pregunta me parece muy difícil de contestar puesto que cada pareja es un mundo diferente con sus cosas peculiares que les caracterizan.
Y para finalizar, ¿las personas que no hacen ninguna declaración de amor son las que más sienten? Yo pienso que eso da igual, puedes no hacer ninguna declaración de amor y no sentir nada y por lo tanto Platón estaría confundido o al contrario y poder estar profundamente enamorado y dar la razón ciegamente al filósofo y pensador griego.
¿Que creéis vosotros que es una declaración de amor? ¿Estáis de acuerdo con su razonamiento?
Cuantas preguntas y tan pocas respuestas son las que tenemos a nuestra disposición.
"La mayor declaración de amor es la que no se hace; el hombre que siente mucho habla poco."
Platón.
Algunos pensarán que no decir lo que sientes es un acto de cobardía otros pensarán que eso significa que se trata de una persona tímida y después habrán personas que pensarán que por no mostrar sus sentimientos públicamente realmente no quieren a esas personas.
¿Una persona es cobarde si no dice sus sentimientos a la persona de sus sueños? Yo personalmente creo que no, ya que casi siempre eso va unido a personas tímidas o a las que les cuesta expresar sus sentimientos y por lo tanto catalogar a esas personas como cobardes seria a mi parecer algo erróneo.
¿Y es que acaso por no mostrar en público signos de afecto amamos menos a esa persona? A mi esta pregunta me parece muy difícil de contestar puesto que cada pareja es un mundo diferente con sus cosas peculiares que les caracterizan.
Y para finalizar, ¿las personas que no hacen ninguna declaración de amor son las que más sienten? Yo pienso que eso da igual, puedes no hacer ninguna declaración de amor y no sentir nada y por lo tanto Platón estaría confundido o al contrario y poder estar profundamente enamorado y dar la razón ciegamente al filósofo y pensador griego.
¿Que creéis vosotros que es una declaración de amor? ¿Estáis de acuerdo con su razonamiento?
Cuantas preguntas y tan pocas respuestas son las que tenemos a nuestra disposición.
domingo, 24 de febrero de 2013
Un camino obsoleto.
Volveremos a ser dos personas escondidas en medio de la oscuridad de una habitación mirándonos los ojos con serenidad, la serenidad de la oscuridad descuartizando nuestros cuerpos.
La brújula marcaba un camino obsoleto porque nosotros queríamos ir a otro lugar pero el destino nos obligaba a seguir caminando por el obsoletismo que finalmente nos conduciría al borde de un precipicio que hacia que miráramos el fondo de aquellas profundidades con cierto grado de resignación.
Un día se instaló en nosotros un aire de positivismo que hizo que nuestras fuerzas se doblegasen e intentaran no caer al abismo pero por mucho que lo intentáramos seguíamos en el mismo lugar.
Nos encontrábamos varados y sin ninguna posibilidad de cambiar la situación pero una mano cálida nos ayudó a subir para que no cayéramos al precipicio y justo en el momento en que casi habíamos conseguido levantarnos esa mano amiga nos empujó.
Aún seguimos en caída libre.
La brújula marcaba un camino obsoleto porque nosotros queríamos ir a otro lugar pero el destino nos obligaba a seguir caminando por el obsoletismo que finalmente nos conduciría al borde de un precipicio que hacia que miráramos el fondo de aquellas profundidades con cierto grado de resignación.
Un día se instaló en nosotros un aire de positivismo que hizo que nuestras fuerzas se doblegasen e intentaran no caer al abismo pero por mucho que lo intentáramos seguíamos en el mismo lugar.
Nos encontrábamos varados y sin ninguna posibilidad de cambiar la situación pero una mano cálida nos ayudó a subir para que no cayéramos al precipicio y justo en el momento en que casi habíamos conseguido levantarnos esa mano amiga nos empujó.
Aún seguimos en caída libre.
sábado, 23 de febrero de 2013
Un futuro mejor.
Tiraba los pocos pedazos de mi mente al viento, un viento que se alejaba al mar y allí en el mar es donde mi dulce locura y mi aplastante lógica se unian y volvian ser una única persona.
Una persona con unas ganas feroces de comerse el mundo y de luchar por conseguir lo que creía , donde lo justo era lo que prevalecia y donde mentir era considerado una repudia social.
Donde decir lo que creías era merecedor de una ovación de la gente.
Donde el contrario te felicita por la defensa que hacias de los intereses que considerabas adecuados y donde ambos adversarios eran amigos y pensaban en luchar por conseguir un mundo mejor cada uno de diferente manera sin necesidad de la violencia, mentira, desidia o cualquier tipo de traición o discriminación.
Un mundo que mucha gente planeó y dejó en el camino.
Un mundo que tú y yo tenemos que conseguir para tener un futuro mejor.
Una persona con unas ganas feroces de comerse el mundo y de luchar por conseguir lo que creía , donde lo justo era lo que prevalecia y donde mentir era considerado una repudia social.
Donde decir lo que creías era merecedor de una ovación de la gente.
Donde el contrario te felicita por la defensa que hacias de los intereses que considerabas adecuados y donde ambos adversarios eran amigos y pensaban en luchar por conseguir un mundo mejor cada uno de diferente manera sin necesidad de la violencia, mentira, desidia o cualquier tipo de traición o discriminación.
Un mundo que mucha gente planeó y dejó en el camino.
Un mundo que tú y yo tenemos que conseguir para tener un futuro mejor.
lunes, 18 de febrero de 2013
La cita con cianuro. El esfuerzo es éxito.
"Todo esfuerzo es un éxito" A.Bessières.
Mi conclusión de esta frase es que para conseguir algo debemos de poner empeño, dedicación y constancia, es decir esforzarnos, pero el mero hecho de no conseguir lo que nos hemos propuesto no es una decepción si no un paso que hemos dado hacia adelante para conseguir nuestros sueños, objetivos o propósitos porque la acción de habernos esforzado por si sola ya es un éxito, no conseguir el gran deseo, si no intentarlo.
Si lo intentamos y nos esforzamos tendremos el éxito de haber querido realizar nuestros retos, un éxito que nos aporta una satisfacción incluso mayor.
Así que hay que luchar para esforzarnos, porque el esfuerzo es éxito.
domingo, 17 de febrero de 2013
Pensamientos efímeros en efervescencia.
Hay instantes de la vida de una persona que se repiten constantemente en su cabeza y que nos traen recuerdos imborrables, recuerdos que por mucho que quisiéramos olvidar se quedarían incrustados en nuestro subconsciente y nos acompañarían hasta el fin de nuestros tiempos, todos tenemos al menos un recuerdo que ganaría la batalla al olvido.
También hay pensamientos que pueblan nuestra mente de felicidad o al contrario, de tristeza, o ¿es que acaso tus pensamientos no son dignos de recordar? Pues solo somos pensamientos efímeros en efervescencia.
La belleza de soñar con algo que nadie ha soñado, con algo inexistente nos altera y nos conmueve o por lo menos no nos deja indiferentes, ¿nunca os ha ocurrido que después de despertar de un sueño habéis tenido la sensación de que el sueño era tan vívido e intenso que parecía absolutamente real? Pero después te despiertas y ves la realidad en la que si quieres puedes conseguir lo que te propones.
Pues debemos de volver a ver las cosas cotidianas como si fuera un sueño nunca soñado, es lo que debemos emular cada vez que amanece y dejar en el pasado las preocupaciones y ocuparnos de nuestro presente como si estuviéramos soñando algo fascinante, algo que quede fijado en nuestra memoria para siempre.
También hay pensamientos que pueblan nuestra mente de felicidad o al contrario, de tristeza, o ¿es que acaso tus pensamientos no son dignos de recordar? Pues solo somos pensamientos efímeros en efervescencia.
La belleza de soñar con algo que nadie ha soñado, con algo inexistente nos altera y nos conmueve o por lo menos no nos deja indiferentes, ¿nunca os ha ocurrido que después de despertar de un sueño habéis tenido la sensación de que el sueño era tan vívido e intenso que parecía absolutamente real? Pero después te despiertas y ves la realidad en la que si quieres puedes conseguir lo que te propones.
Pues debemos de volver a ver las cosas cotidianas como si fuera un sueño nunca soñado, es lo que debemos emular cada vez que amanece y dejar en el pasado las preocupaciones y ocuparnos de nuestro presente como si estuviéramos soñando algo fascinante, algo que quede fijado en nuestra memoria para siempre.
viernes, 15 de febrero de 2013
¿Que es el amor platónico?
San Valentín, el día especialmente dedicado a los enamorados.
Y normalmente siempre se piensa en esas parejas de enamorados tan felices que van por la calle de la mqno y viven un dulce idilio, pero quién se ha parado a pensar en esos amores no correspondidos o peor en esos amores imposibles, es decir los platónicos.
Nadie piensa en ellos excepto los propios enamorados platónicos esos que sueñan con un amor que tanto desean y tanto anhelan, ellos son unos soñadores compulsivos, sueñan en imposibles.
"-¿Qué es exactamente amor platónico?
-Lo que la gente entiende por amor platónico no se parece mucho a lo que Platón escribió sobre el tema.
Después nos contó que la gran tesis platónica sobre el amor dice que estamos hechos para la belleza, y que la belleza es una llamada que quiere despertarnos, espabilarnos y rescatarnos de la vulgaridad. El amor llama al corazón humano por medio de la belleza sensible. Alguna vez en la vida, esa llamada atractiva se escucha con una intensidad que arrebata y deja fuera de sí al que la siente. Es una desconcertante situación en la que el enamorado no sabe exactamente lo que quiere, y ni siquiera tiene palabras para expresarlo. Por eso dice Platón que el amor es hijo de la riqueza y de la pobreza, pues es rico en deseos y pobre en resultados. También dice que esa promesa de felicidad excita en el alma el recuerdo de su origen divino y la nostalgia de la felicidad perdida en su primera existencia."
Y normalmente siempre se piensa en esas parejas de enamorados tan felices que van por la calle de la mqno y viven un dulce idilio, pero quién se ha parado a pensar en esos amores no correspondidos o peor en esos amores imposibles, es decir los platónicos.
Nadie piensa en ellos excepto los propios enamorados platónicos esos que sueñan con un amor que tanto desean y tanto anhelan, ellos son unos soñadores compulsivos, sueñan en imposibles.
"-¿Qué es exactamente amor platónico?
-Lo que la gente entiende por amor platónico no se parece mucho a lo que Platón escribió sobre el tema.
Después nos contó que la gran tesis platónica sobre el amor dice que estamos hechos para la belleza, y que la belleza es una llamada que quiere despertarnos, espabilarnos y rescatarnos de la vulgaridad. El amor llama al corazón humano por medio de la belleza sensible. Alguna vez en la vida, esa llamada atractiva se escucha con una intensidad que arrebata y deja fuera de sí al que la siente. Es una desconcertante situación en la que el enamorado no sabe exactamente lo que quiere, y ni siquiera tiene palabras para expresarlo. Por eso dice Platón que el amor es hijo de la riqueza y de la pobreza, pues es rico en deseos y pobre en resultados. También dice que esa promesa de felicidad excita en el alma el recuerdo de su origen divino y la nostalgia de la felicidad perdida en su primera existencia."
miércoles, 13 de febrero de 2013
Labios sellados.
No perderé ninguna oportunidad más por cosas irreversibles
Dame el tiempo que no te haga falta dices, como si eso fuera posible, no tengo tiempo que perder para tomar mis propias decisiones.
Cada vez que cedo tu olvidas que caíste antes que yo y ahora es imposible deshacer lo que me hiciste.
No pretendas saber mas de mi.
Mejor no preguntes, no pierdas tu tiempo.
Me dejé la vergüenza olvidada en el último respiro, en nuestra última palabra antes de despedirnos por casualidad.
Y finalmente quiero que sepas que para pedir perdón nunca es tarde y que tú, tu mente y unas palabras esculpidas en un folio han penetrado como flechas en llamas en mi corazón helado.
Dame el tiempo que no te haga falta dices, como si eso fuera posible, no tengo tiempo que perder para tomar mis propias decisiones.
Cada vez que cedo tu olvidas que caíste antes que yo y ahora es imposible deshacer lo que me hiciste.
No pretendas saber mas de mi.
Mejor no preguntes, no pierdas tu tiempo.
Me dejé la vergüenza olvidada en el último respiro, en nuestra última palabra antes de despedirnos por casualidad.
Y finalmente quiero que sepas que para pedir perdón nunca es tarde y que tú, tu mente y unas palabras esculpidas en un folio han penetrado como flechas en llamas en mi corazón helado.
martes, 12 de febrero de 2013
Un día entre paréntesis... de febrero.
La cama por la mañana nos atrapa con su despiadada calidez que por la noche es difícil de encontrar y si la encontramos un mundo de pensamientos lejanos y moribundos nos absorbe como la esponja absorbe el agua, y cuando la cama nos secuestra en su cárcel es complicado desprenderse de ella, lo único que se puede hacer es armarse de valor y poner un pie en el frío suelo, vestirse, desayunar y pasar la mañana lamentandonos por la hora a la que nos acostamos la noche anterior.
Pero hoy ni la cama me ha retenido, ni cuando he puesto un pie en el suelo estaba frío y tampoco me he arrepentido por la hora en la que me desperté anoche.
La mañana era un paréntesis en una vida cotidiana más.
Y por la tarde cuando el sol aún pegaba con fuerza y el frío ese del que tanto hablan en televisión era un mero espejismo salí a andar y por el camino me encontré cosas simples y asombrosas pero casi invisbles.
Nubes que cambiaban de lugar al agachar la cabeza.
Un sol resplandeciente que hacía que miraras al suelo y pensaras en todos esos "bichejos" que viven en el suelo y que te hacían sentir un gigante con medidas desequilibradas.
Seguias corriendo y observabas como los pájaros echaban a correr despavoridos con tu presencia como si fueras un tirano y como al rato unas cortinas grises caprichosas se posaban en medio del sol y hundia el paisaje en un estado de penumbra pero tú mismo sabias como al rato esas nubes caprichosas dejaría paso a la luz y a la vida y por último te parabas a descansar un rato en el césped y decidías tumbarte y descubrías en esas selvas inmensas un pequeño insecto que sobrevivia al invierno.
Pequeñas cosas casi perfectas que llenan tu vida de luz en el momento indicado y hace que una inmensa sonrisa se esboce en mi cara en este preciso instante, pues me siento libre, ilusionado y con ganas de comerme el mundo.
Hoy no es día para tomar cianuro aunque si lo piensas bien...
Pero hoy ni la cama me ha retenido, ni cuando he puesto un pie en el suelo estaba frío y tampoco me he arrepentido por la hora en la que me desperté anoche.
La mañana era un paréntesis en una vida cotidiana más.
Y por la tarde cuando el sol aún pegaba con fuerza y el frío ese del que tanto hablan en televisión era un mero espejismo salí a andar y por el camino me encontré cosas simples y asombrosas pero casi invisbles.
Nubes que cambiaban de lugar al agachar la cabeza.
Un sol resplandeciente que hacía que miraras al suelo y pensaras en todos esos "bichejos" que viven en el suelo y que te hacían sentir un gigante con medidas desequilibradas.
Seguias corriendo y observabas como los pájaros echaban a correr despavoridos con tu presencia como si fueras un tirano y como al rato unas cortinas grises caprichosas se posaban en medio del sol y hundia el paisaje en un estado de penumbra pero tú mismo sabias como al rato esas nubes caprichosas dejaría paso a la luz y a la vida y por último te parabas a descansar un rato en el césped y decidías tumbarte y descubrías en esas selvas inmensas un pequeño insecto que sobrevivia al invierno.
Pequeñas cosas casi perfectas que llenan tu vida de luz en el momento indicado y hace que una inmensa sonrisa se esboce en mi cara en este preciso instante, pues me siento libre, ilusionado y con ganas de comerme el mundo.
Hoy no es día para tomar cianuro aunque si lo piensas bien...
lunes, 11 de febrero de 2013
La cita con cianuro. Insoportablemente banales.
La cita célebre de esta semana es del gran escritor vallisoletano Miguel Delibes y dice así:
"Al palpar la cercanía de la muerte, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad, porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablmente banales." Miguel Delibes.
Nos preocupamos demasiado por cosas que no merecen tanto espacio en nuestra cabeza hasta que nos encontramos frente a frente con la muerte y decidimos hacer todo aquello que si tiene una importancia real antes de morir pues los muertos no tienen la capacidad de pensar cosas estupidas, tan solo son carne humana en descomposición con un recuerdo permanente, ireversible e infinito que queda marcado en el alma y el corazón de todos los que conocian al difunto.
En el recuerdo a tu persona y a tu alma. Siempre con nosotros. Y contigo.
"Al palpar la cercanía de la muerte, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad, porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablmente banales." Miguel Delibes.
Nos preocupamos demasiado por cosas que no merecen tanto espacio en nuestra cabeza hasta que nos encontramos frente a frente con la muerte y decidimos hacer todo aquello que si tiene una importancia real antes de morir pues los muertos no tienen la capacidad de pensar cosas estupidas, tan solo son carne humana en descomposición con un recuerdo permanente, ireversible e infinito que queda marcado en el alma y el corazón de todos los que conocian al difunto.
En el recuerdo a tu persona y a tu alma. Siempre con nosotros. Y contigo.
sábado, 9 de febrero de 2013
Déjate llevar.
Nadie te ha preguntado como te encuentras.
Nadie ha pensado si podías estar bien o mal.
Nadie ha sentido lo que realmente te pasa.
Nadie absolutamente nadie ha notado que necesitabas la ayuda de los demás para seguir adelante con fuerza e ilusión.
Nadie ha tenido el tiempo suficiente como para decirte que tal te ha ido el día.
Aunque si somos sinceros yo tampoco les he preguntado como se encontraban.
No he pensado si estaban bien o mal.
Tampoco he sentido su dolor y sus problemas.
Y no he prestado mi ayuda para solucionar lo que me hubieran pedido.
Y todo esto pasa porque vivimos tan deprisa que no tenemos un segundo para fijarnos en lo que realmente está pasando por la cabeza de los demás.
Vivimos con estrés.
Vivimos envueltos en una constante tensión.
Vivimos bajo presión.
Vivimos pensando en lo que dirán o pensarán de nosotros.
Vivimos sin un momento de respiro en el que podamos sentir el dolor real de las personas.
Vivimos con la esperanza de hacer lo que queramos en un tiempo limitado.
Vivimos pensando los días que faltan para ir a tal sitio cuando en realidad deberíamos estar pasándolo en grande o simplemente siendo felices en el sitio en el que estamos y dejar que pasen los días y llegue el momento en el que vayamos al sitio que tanto queremos sin la duda de que hubiéramos hecho si... Ante la duda hay que hacerlo y vivir el momento antes de que sea demasiado tarde y estemos encerrados en un ataúd.
Y si te confundes habrás aprendido que no hay que volver a hacerlo y no vivirás preguntándote lo que hubiera pasado.
Relájate, respira hondo, suelta el aire poco a poco y cierra los ojos.
Ahora piensa en lo que puedes hacer para mejorar la vida de los demás. Abre los ojos y verás lo que tienes a tu alrededor. Verás que te rodean cosas simples pero de gran belleza y cosas complejas con sentimientos reales.
Cierra los ojos y déjate llevar.
Nadie ha pensado si podías estar bien o mal.
Nadie ha sentido lo que realmente te pasa.
Nadie absolutamente nadie ha notado que necesitabas la ayuda de los demás para seguir adelante con fuerza e ilusión.
Nadie ha tenido el tiempo suficiente como para decirte que tal te ha ido el día.
Aunque si somos sinceros yo tampoco les he preguntado como se encontraban.
No he pensado si estaban bien o mal.
Tampoco he sentido su dolor y sus problemas.
Y no he prestado mi ayuda para solucionar lo que me hubieran pedido.
Y todo esto pasa porque vivimos tan deprisa que no tenemos un segundo para fijarnos en lo que realmente está pasando por la cabeza de los demás.
Vivimos con estrés.
Vivimos envueltos en una constante tensión.
Vivimos bajo presión.
Vivimos pensando en lo que dirán o pensarán de nosotros.
Vivimos sin un momento de respiro en el que podamos sentir el dolor real de las personas.
Vivimos con la esperanza de hacer lo que queramos en un tiempo limitado.
Vivimos pensando los días que faltan para ir a tal sitio cuando en realidad deberíamos estar pasándolo en grande o simplemente siendo felices en el sitio en el que estamos y dejar que pasen los días y llegue el momento en el que vayamos al sitio que tanto queremos sin la duda de que hubiéramos hecho si... Ante la duda hay que hacerlo y vivir el momento antes de que sea demasiado tarde y estemos encerrados en un ataúd.
Y si te confundes habrás aprendido que no hay que volver a hacerlo y no vivirás preguntándote lo que hubiera pasado.
Relájate, respira hondo, suelta el aire poco a poco y cierra los ojos.
Ahora piensa en lo que puedes hacer para mejorar la vida de los demás. Abre los ojos y verás lo que tienes a tu alrededor. Verás que te rodean cosas simples pero de gran belleza y cosas complejas con sentimientos reales.
Cierra los ojos y déjate llevar.
miércoles, 6 de febrero de 2013
Un reencuentro bajo la luz del crepúsculo.
Bajo la luz del último crepúsculo del día contemplabamos nuestro alrededor bajo un almendro ya florecido.
Enfrente nuestra había un pequeño sendero que nos conducía a la acequia donde en verano soliamos bañarnos a la llamada del primer rayo de sol, a nuestro alrededor almendros florecidos se peleaban por conseguir un poco de espacio y detrás nuestro se situaba el camino a la parte alta de la montaña desde donde se podría divisar y percibir las luces de la gran ciudad costera, un mundo diferente a este, ajetreado, lleno de complicaciones y a menudo absorbente o incluso agónico.
Me dijiste que era tarde pero que tal vez otro día volveriamos a pasar la tarde los dos juntos. Nos levantamos y fuimos hacía la acequia por aquel lúgubre y estrecho sendero.
Te paraste y recogiste del suelo una hoja seca y me dijiste que la próxima vez que nos vieramos ella me daría esa hoja seca y yo tendría que recoger otra para darsela.
Al pasar la acequia nos acordamos del verano pasado y de aquellos juegos de niños que protagonizabamos y en los que nos gustaba ser unos felices ignorantes, los dos sonreimos y una leve carcajada se escapó de nuestras mandibulas.
El pueblo se veía a lo lejos y el repicar de las campanas indicaba que ya eran las 19:00. Bajamos la cuesta que nos guiaba a aquellas viejas pero restauradas casuchas de al lado de la plaza.
Me despedí de ella en la puerta de casa de su abuela y los dos sabiamos que hasta dentro de dos semanas o más no nos volveriamos a ver o almenos era eso lo que reflejaban sus púpilas.
Nos abrazamos muy fuerte y una leve corriente electrica atravesó mi cuerpo.
Me monté al coche de regreso a la ciudad y ya sabia que mi ilusión se diluia poco a poco y mi felicidad se disipaba.
Y pensar que hasta hace poco eramos dos desconocidos de los que habiamos oido hablar alguna vez y a lo sumo intercambiar palabras escuetas sin ningún tipo de interés.
Al llegar a casa mi dosis de cianuro me esperaba pacientemente.
Enfrente nuestra había un pequeño sendero que nos conducía a la acequia donde en verano soliamos bañarnos a la llamada del primer rayo de sol, a nuestro alrededor almendros florecidos se peleaban por conseguir un poco de espacio y detrás nuestro se situaba el camino a la parte alta de la montaña desde donde se podría divisar y percibir las luces de la gran ciudad costera, un mundo diferente a este, ajetreado, lleno de complicaciones y a menudo absorbente o incluso agónico.
Me dijiste que era tarde pero que tal vez otro día volveriamos a pasar la tarde los dos juntos. Nos levantamos y fuimos hacía la acequia por aquel lúgubre y estrecho sendero.
Te paraste y recogiste del suelo una hoja seca y me dijiste que la próxima vez que nos vieramos ella me daría esa hoja seca y yo tendría que recoger otra para darsela.
Al pasar la acequia nos acordamos del verano pasado y de aquellos juegos de niños que protagonizabamos y en los que nos gustaba ser unos felices ignorantes, los dos sonreimos y una leve carcajada se escapó de nuestras mandibulas.
El pueblo se veía a lo lejos y el repicar de las campanas indicaba que ya eran las 19:00. Bajamos la cuesta que nos guiaba a aquellas viejas pero restauradas casuchas de al lado de la plaza.
Me despedí de ella en la puerta de casa de su abuela y los dos sabiamos que hasta dentro de dos semanas o más no nos volveriamos a ver o almenos era eso lo que reflejaban sus púpilas.
Nos abrazamos muy fuerte y una leve corriente electrica atravesó mi cuerpo.
Me monté al coche de regreso a la ciudad y ya sabia que mi ilusión se diluia poco a poco y mi felicidad se disipaba.
Y pensar que hasta hace poco eramos dos desconocidos de los que habiamos oido hablar alguna vez y a lo sumo intercambiar palabras escuetas sin ningún tipo de interés.
Al llegar a casa mi dosis de cianuro me esperaba pacientemente.
martes, 5 de febrero de 2013
La cita con cianuro. Sueños y realidad.
La cita célebre de esta semana es del estadounidense Ambrose Bierce.
"Si deseas que tus sueños se hagan realidad, ¡despierta!"
Ambrose Bierce.
Es decir, que para poder conseguir nuestros sueños debemos de ponernos a la acción y arremangarnos y dedicarnos totalmente a ello, no agazaparnos en nuestro escondite y estar ronroneando en nuestra cabeza la idea de cumplir nuestro sueño, porque si conseguimos algo con esfuerzo la recompensa es aun mayor.
"Si deseas que tus sueños se hagan realidad, ¡despierta!"
Ambrose Bierce.
Es decir, que para poder conseguir nuestros sueños debemos de ponernos a la acción y arremangarnos y dedicarnos totalmente a ello, no agazaparnos en nuestro escondite y estar ronroneando en nuestra cabeza la idea de cumplir nuestro sueño, porque si conseguimos algo con esfuerzo la recompensa es aun mayor.
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