Eras alguien.

Me preguntaba por qué

ese alguien tan alguien,

tuvo que rastrear las migas

de ese pan cualquiera y encontrarme. 

Me preguntaba por que 

cuando yo pescaba

siempre ponía de anzuelo

alguna de esas mentirijillas.

Me preguntaba por qué

cuando el frío rozaba mi piel 

jamás te encontré en ningún

rincón de mi cama.

Me preguntaba por qué

seguía preguntando al vacío.

Cuando todos sabemos

que ya no estás aquí.

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¡Hasta pronto!