Ni siquiera los griegos
pudieron quemar Troya
con tanta maldad como
pegaste fuego tú, a tus sueños.
Esos que ardieron
por no tener los pies en la tierra
llena de cristales de vasos rotos
por las veces que te ahogabas en ellos.
Quiere el fuego saber de ti
y de tus circunstancias.
Para apagarse de una vez
y solo arder de vez en cuando.
Apagarán los fuegos
con vasos de agua rotos.
Poquito a poco, tal y como a ti
te gustaba saltar a los charcos.
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¡Hasta pronto!
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¡Hasta pronto!
Pues bueno... sin palabras, como siempre ^^
ResponderEliminarMe encantan tus poemas!
Un beso!! :D
Nadie tiene derecho a quemar nuestros sueños, pues estos son como un ave fénix, más tarde o más temprano, renacen de sus propias cenizas, porque nuestros sueños son parte de nosotros.
ResponderEliminarSaludos y pasate cuando quieras :3
El 3º verso es precioso y casi autónomo...
ResponderEliminar"Quiere el fuego saber de ti
y de tus circunstancias.
Para apagarse de una vez
y solo arder de vez en cuando."
Me ha encantado, enhorabuena.
Gracias! Abrazos :)
EliminarNuestros sueños son lo mas valioso que tenemos, lo que nos motiva,*en mi caso lo hace y me mueve hacia adelante tratando de buscar ese "objetivo dorado" que anhelo.
ResponderEliminarMucha gente tratara de pisotearte en el camino pero debes mantenerte firme y los sueños cambian conforme a las circunstancias, pero nunca dejes de soñar jamas
muy hermoso! un abrazo!
Exactamente, no hay que dejarse pisotear por nadie.
EliminarAbrazos con cianuro.
Me ha encantado el poema. De veras.
ResponderEliminarMe he imaginado esos sueños, los vasos... Realmente, me ha gustado mucho la metáfora, Chico con cianuro.
Espero leer más cosas escritas por ti.
Un abrazo de la Chica Miserable
Me alegro mucho! Besos con cianuro.
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